Ford
Marca:
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Ford |
Pais
de Origen: |
Estados
Unidos |
Año
de Inicio de actividades: |
1903 |
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Modelos
más representativos |
Año |
Ford
DT |
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Ford
Ecosport |
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Ford
Escape |
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Ford
Expedition |
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Ford
Explorer |
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Ford
f Series |
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Ford
Festiva |
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Ford
Fiesta |
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Ford
Focus |
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Ford
Fusion |
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Ford
Granada/Escorpio
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Ford
Mondeo |
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Ford
Streetka
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Ford
T
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Ford
Taurus
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Ford
Transit Connect |
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Ford
Motor Company es una empresa constructora de autos fundada
por Henry Ford en Dearborn, Michigan 16 de junio de 1903.
En la actualidad Ford tiene plantas de construcción
en muchos países del mundo, y crea autos para diferentes
países basándose en gustos territoriales.
Henry
Ford no alcanzó el éxito hasta su tercer
proyecto empresarial, lanzado en 1903: la Ford Motor Company,
fundada junto con otros 11 inversores y con una inversión
inicial de 28.000 dólares estadounidenses. En un
auto de reciente diseño, Ford hizo una exhibición
en la cual el auto cubrió la distancia de una milla
en el lago helado de St. Clair en 39,4 segundos, batiendo
el récord de velocidad en tierra. Convencido por
éste éxito, el famoso piloto de autos Barney
Oldfield, que llamó a este modelo de Ford "999"
en honor a uno de los autos de carreras de la época,
condujo el auto a lo largo y ancho del país, haciendo
que la nueva marca de Ford fuese conocida en todo Estado
Unidos.
Ford
también fue uno de los primeros impulsores de las
500 millas de Indianápolis. Ford asombró
al mundo en 1914 ofreciendo un salario a sus trabajadores
de 5 dólares al día, que en esa época
era más del doble de lo que cobraban la mayoría
de estos empleados. Esta táctica le resultó
inmensamente provechosa cuando los mejores mecánicos
de Detroit comenzaron a cambiarse a la empresa Ford, trayendo
con ellos su capital humano y experiencia, incrementando
la productividad y reduciendo los costes de formación.
Ford lo denominó "motivación salarial".
El uso de la integración vertical en la compañía
también resultó muy útil, cuando
Ford construyó una fábrica gigantesca en
la que entraban materias primas y salían autos
terminados.
Proyecto
de la compañía consistía en fabricar
autos sencillos y baratos destinados al consumo masivo
de la familia media americana. Hasta entonces el auto
había sido un objeto de fabricación artesanal
y de coste prohibitivo, destinado a un público
muy limitado. Ford puso el auto al alcance de las clases
medias, introduciéndolo en la era del consumo en
masa.
También
se preocupó de instaurar una publicidad masiva
en Detroit, asegurándose de que en cada periódico
apareciesen historias y anuncios sobre su nuevo producto.
Su sistema de concesionarios locales permitió que
el auto estuviese disponible en cada ciudad de Norte América.
Por su parte, empresarios fueron enriqueciéndose
y ayudaron a publicitar la idea misma del automovilismo,
comenzando a desarrollarse los clubes automovilísticos
para ayudar a los conductores y para salir más
allá de la ciudad. Ford estaba encantado de vender
a los granjeros, que miraban el vehículo como un
invento más para ayudarles en su trabajo.
Las
ventas se dispararon. Durante varios años se iban
batiendo los propios records del año anterior.
Las ventas sobrepasaron los 250.000 autos en 1914. Por
su parte, siempre a la caza de la reducción de
costes y mayor eficiencia, Ford introdujo en sus plantas
en 1913 las cintas de ensamblaje móviles, que permitían
un incremento enorme de la producción. Dicho método,
inspirado en el modo de trabajo de los mataderos de Detroit,
consistía en instalar una cadena de montaje a base
de correas de transmisión y guías de deslizamiento
que iban desplazando automáticamente el chasis
del auto hasta los puestos en donde sucesivos grupos de
operarios realizaban en él las tareas encomendadas,
hasta que el auto estuviera completamente terminado. El
sistema de piezas intercambiables, ensayado desde mucho
antes en fábricas estadounidenses de armas y relojes,
abarataba la producción y las reparaciones por
la vía de la estandarización del producto.
Si
bien se le suele dar el mérito a Ford por esta
idea, las fuentes contemporáneas indican que el
concepto y su desarrollo partió de los empleados
Clarence Avery, Peter E. Martin, Charles E. Sorensen y
C.H. Wills. Para 1916 el precio había caído
a 360 dólares por el auto básico, llegando
las ventas a la cifra de 472.000.
Para
1918 la mitad de los autos en América eran el modelo
T de Ford. Ford escribió en su autobiografía
que "cualquier cliente puede tener el auto del color
que quiera siempre y cuando sea negro". Hasta la
invención de la cadena de ensamblaje, en la que
el color que se utilizaba era el negro porque tenía
un tiempo de secado más corto, sí que hubo
Ford T en otros colores, incluyendo el rojo. El diseño
fue fervientemente impulsado y defendido por Henry Ford,
y su producción continuó hasta finales de
1927. La producción total final fue de 15.007.034
unidades, récord que se mantuvo durante los siguientes
45 años.
La
fabricación en cadena, con la que Ford revolucionó
la industria automovilística, era una apuesta arriesgada,
pues sólo resultaría viable si hallaba una
demanda capaz de absorber su masiva producción;
las dimensiones del mercado estadounidense ofrecían
un marco propicio, pero además Ford evaluó
correctamente la capacidad adquisitiva del hombre medio
estadounidense a las puertas de la sociedad de consumo.
Siempre que existiera esa demanda, la fabricación
en cadena permitía ahorrar pérdidas de tiempo
de trabajo, al no tener que desplazarse los obreros de
un lugar a otro de la fábrica, llevando hasta el
extremo las recomendaciones de la «organización
científica del trabajo» de Frederick W. Taylor.
Cada
operación quedaba compartimentada en una sucesión
de tareas mecánicas y repetitivas, con lo que dejaban
de tener valor las cualificaciones técnicas o artesanales
de los obreros, y la industria naciente podía aprovechar
mejor la mano de obra sin cualificación de los
inmigrantes que arribaban masivamente a Estados Unidos
cada año. Los costes de adiestramiento de la mano
de obra se redujeron, al tiempo que la descualificación
de la mano de obra eliminaba la incómoda actividad
reivindicativa de los sindicatos de oficio (basados en
la cualificación profesional de sus miembros),
que eran las únicas organizaciones sindicales que
tenían fuerza en aquella época en Estados
Unidos. Al mismo tiempo, la dirección de la empresa
adquiría un control estricto sobre el ritmo de
trabajo de los obreros, regulado por la velocidad que
se imprimía a la cadena de montaje.
En
cambio la reducción de los costes permitió
a Ford elevar los salarios que ofrecía a sus trabajadores
muy por encima de lo que era normal en la industria estadounidense
de la época: con su famoso salario de cinco dólares
diarios se aseguró una plantilla satisfecha y nada
conflictiva, a la que podía imponer normas de conducta
estrictas dentro y fuera de la fábrica, vigilando
su vida privada a través de un «Departamento
de Sociología». Los trabajadores de la Ford
entraron, gracias a los altos salarios que recibían,
en el umbral de las clases medias, convirtiéndose
en consumidores potenciales de productos como los autos
que Ford vendía; toda una transformación
social se iba a operar en Estados Unidos con la adopción
de estos métodos empresariales.
El
único hijo de Henry Ford, Edsel, asumió
la presidencia de la compañía en 1919 y
estuvo a su cargo hasta 1943, año en que murió
prematuramente de cáncer a la edad de 49 años.
Henry
Ford retomó la presidencia sólo durante
dos años más, ya que se retiró poco
después de que terminara la II Guerra Mundial.
Entonces, su nieto Henry Ford II le sucedió como
Presidente de la Compañía a la temprana
edad de 28 años, y estuvo en el cargo hasta 1980.
Y no defraudó a su abuelo. La combinación
de un fuerte liderazgo y una poderosa imaginación
guió a Ford en la realización de la transición
de un negocio familiar a una moderna sociedad anónima.
Desde
el principio, el componente humano ha sido siempre el
centro de la política de la compañía
además está reconocida como una de las principales
escuelas empresariales del mundo y la calidad de su formación
en administración no tiene parangón.
Los
europeos siempre han desempeñado un papel importante
en el desarrollo de Ford Motor Company. En los primeros
años, Josef Galamb, de origen húngaro, desempeñó
un papel decisivo en el desarrollo del Modelo T, mientras
que Danes William Knudsen y Charles Sorensen, eran los
socios de producción en los que más confiaba
Henry Ford cuando la fabricación en serie aún
estaba en pañales. Más recientemente, en
1993, Alex Trotman, ahora Lord Trotman, se convirtió
en el primer Presidente de Ford nacido en Europa y, en
la actualidad, Sir Nick Scheele y David Thursfield, ambos
británicos, ocupan cargos destacados en la compañía,
como Presidente de Ford Motor Company y Vicepresidente
de Operaciones Internacionales y Compras Globales, respectivamente.
Ahora,
una nueva generación de la familia Ford dirige
la compañía, y son las responsabilidades
tanto sociales como medioambientales las que ocupan un
lugar destacado entre las prioridades de William Clay
Ford Jr, bisnieto de Henry Ford, que accedió a
la presidencia en 1999:
Al
llegar a nuestro centésimo aniversario, queremos
seguir proporcionando movilidad al mundo fabricando grandes
productos accesibles en todos los sentidos de la palabra:
económico, ecológico y social. Crear y mantener
una libertad de movimiento para todos honrará nuestro
pasado y asegurará nuestro futuro".
La
familia de autos Ford ha sorprendido repetidas veces al
mundo entero: El Ford Granada/Escorpio se hizo con el
codiciado trofeo al auto Europeo del Año en 1986
y el Ford Mondeo, en 1994, y el Ford Focus, en 1999, repitieron
esta hazaña. La Ford Transit Connect acaba de ganar
el Premio a la Furgoneta Europea del Año y los
autos Ford siguen recibiendo elogios en todo el mundo.
En
el 2002, el Ford Streetka reinventó la diversión
de los descapotables biplaza con unos resultados sorprendentes
y ese mismo año el Ford Fusion creó una
nueva variedad de autos urbanos resistentes al tiempo
que versátiles.
Bill
Ford, Consejero Delegado de Ford Motor Company y bisnieto
de Henry Ford, dio a conocer el prototipo Ford DT en el
Salón del auto de Detroit de 2002. Tras una acogida
sumamente favorable, la empresa anunció que comenzaría
su producción en pocas semanas como parte de las
celebraciones de su Centenario.
En
este año del Centenario de Ford también
está en camino un nuevo y orgulloso miembro de
la familia Ford Focus: el Ford Focus C-MAX. Con miras
a la forma de vida del siglo XXI, el Ford Focus C-MAX,
con su excepcional manejabilidad, extremada versatilidad
y elegante diseño, causará un gran revuelo
dentro del sector de los autos multiactividad.
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